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jueves, 24 de noviembre de 2016

El fenómeno "Fata Morgana"

Según la mitología celta, el Hada Morgana, Fata Morgana en italiano o Morgan le Fay, en ingles, era una hechicera, hermanastra del rey Arturo. Tenía la malvada cualidad de transformarse en cualquier animal al amparo de una bruma mágica con el fin de embaucar al prójimo. Junto a sus hermanas regían la mística isla de Avalon, la Isla de la Fortuna o de la Bendita Muerte. Al igual que las Walkirias, estas mujeres mitológicas conducían a las almas de los héroes muertos en batalla hacia la Isla Sagrada donde serían curadas todas sus heridas.

A menudo eran representadas como sirenas, nacidas del mar, habitantes de esta isla sumergida en los confines del mar y capaz de reflotar para recibir a los valerosos guerreros dignos de ser llevados a aquel sagrado lugar.

El efecto "Fata Morgana"
Insólito nombre para un fenómeno que por mucho tiempo se ha confundido con islas emergentes, castillos, dimensiones paralelas o fantasmas.

A lo largo de la historia estos fenómenos visuales han cautivado y confundido al hombre, muchos marinos han relatado esta misma visión de islas volátiles o navíos fantasmas y se ha creado un halo de misterio en torno a este tipo de espejismos que han llevado al descubrimiento de tierras desconocidas por muchos exploradores vikingos y a la aparición de mitos y leyendas relativas a islas fantasma que aparecen y desaparecen, como la isla de San Borondón de Canarias.

La explicación científica es muy sencilla, se trata de un efecto de refracción de la luz, es un espejismo, una ilusión óptica motivada por la diferente velocidad de propagación que lleva el rayo de luz en cada medio de propagación.

Este fenómeno ha servido para alimentar varias leyendas, como la del navío maldito, el Holandés Volador o el Holandés Errante, barco fantasma condenado a vagar eternamente en los mares, leyenda muy popular entre los marinos. Era uno de los pocos cuentos de fantasmas que con algo de suerte podría ser visto, ya fuese ver un barco volador a la distancia, un barco navegando de cabeza o uno saliendo desde lo profundo del mar, siempre con un brillo extraño, también provocado por el Fata Morgana, pues al cambiar la imagen de los objetos distantes concentra la luz en puntos diferentes, haciéndolo brillar.


El Fata Morgana es un efecto óptico que se produce cuando la temperatura del aire cerca del suelo es menor que el aire en un nivel superior

Este cambio en la temperatura provoca una variación de la densidad y por lo tanto en el índice de refracción. La luz procedente del objeto es refractada por el aire y el horizonte llega desde una dirección diferente de lo que cabría esperar. El resultado más clásico es ver un espejismo invertido de objetos que pueden incluso estar más allá del horizonte.


Cuando pensamos en el aire, hay que imaginarlo exactamente como un fluido, que tiene su volumen, densidad, temperatura, etc.; un fluido tal como agua o aceite. Como es conocido, estos dos líquidos no pueden mezclarse y tienden a permanecer separados uno del otro de manera significativa. Ahora pensemos en dos masas de aire que están separados entre sí. Una masa, incluso, se encuentra estacionada en el continente; caliente y seca. La otra, fluye hacia el mar, a menudo más fría. Estos dos fluidos (el aire caliente y seco y el otro frío y húmedo), como se puede imaginar fácilmente, tienen diferentes características de densidad y, cuando están se encuentran entre sí, sin intercambios de calor, tienden a permanecer uno sobre el otro, al igual que el agua y el el aceite. 

Con el tiempo en calma, las distintas densidades entre el aire frío de la superficie y el aire caliente en altura, crea una lente que produce una imagen INVERTIDA, sobre la que la imagen distante parece flotar. Suelen ser visibles por la mañana, después de una noche fría. 

La desviación de los rayos luminosos es convexa hacia arriba, así, una isla, un barco, una montaña, etc., parecen flotar en la atmósfera. Cabe destacar que gracias a la curvatura de la tierra muchas veces el objeto original de la imagen refractada se encuentra más allá de nuestro campo de visión del horizonte, lo que equivale a decir que está más lejos de lo que podemos ver, sin embargo, la refracción de la imagen muchas veces es más grande, (Así desde un punto en superficie podríamos ver lugares distantes más de 400 km, o barcos que circulan tras la línea del horizonte y que aparecen y desaparecen virtualmente) o hasta ciudades que se se alzan sobre los cielos muchas veces pareciendo castillos o islas enteras, donde antes no había nada.


Se diferencia de los espejismos (inferiores) más habituales, sobre todo en verano, en que en estos el aire caliente está más próximo a la superficie y la desviación de la imagen es hacia abajo, creando la ilusión óptica de lagos en el desierto o charcos en carreteras con el asfalto muy caliente. Que no son más que la imagen superpuesta del cielo en el suelo.


Los Fata Morgana solo pueden verse si se cumplen las condiciones específicas, sin embargo existen puntos en el planeta donde son mucho más frecuentes. Son más frecuentes en las mañanas, después de noches frías; también se suele ver en las mañanas del Ártico, mares en completa calma a bajas temperaturas y es muy habitual en las superficies heladas de la Antártida.

2 comentarios:

  1. Interesante. Lo penoso es que haya gente que interprete y asimile absurdos a partir de fenómenos como éste.

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  2. En este video se puede ver a terraplanistas negando lo que ven...incluso un helicóptero en la orilla opuesta (20 km si mal no recuerdo)debe elevarse unos 12 mts para ser visible desde la orilla opuesta... https://www.youtube.com/watch?v=CnrjdD08dWg&t=328s

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